Cuatro motivos por los que estudiar en el extranjero puede mejorar tu trayectoria profesional

Estudiar en el extranjero... demuestra que tienes iniciativa y capacidad de inventiva

Entrar en el mercado laboral no es nada fácil, y todo lo que te ayude a destacar entre la multitud es una ventaja. Estudiar en el extranjero les indicará a tus posibles empleadores que tuviste la capacidad de inventiva y la iniciativa de alejarte de lo que te resultaba conocido y fácil para marcharte a vivir en un país completamente nuevo para ti. Demostrará que te desenvuelves con soltura en entornos multiculturales, que te apasiona el itinerario profesional que has escogido, que te adaptas con facilidad y muestras buena disposición para aprovechar las oportunidades que se te ofrezcan.

Estudiar en el extranjero... te proporciona contactos en todo el mundo

Seguro que en el curso tendrás muchos compañeros de tu nuevo país, pero también habrá muchos otros alumnos que se encontrarán en la misma situación que tú. Esto te dará la oportunidad de entablar amistad con personas de todo el mundo, y así hacer contactos que puedes mantener a lo largo de tu trayectoria profesional y durante toda la vida. ¡Nunca se sabe, puede que alguna vez te encuentres buscando trabajo en un determinado país y recordando el nombre de alguien de tu curso que viva allí y quiera echarte una mano!

Estudiar en el extranjero... te hace más independiente y mejora tu autoconfianza

A decir verdad, la idea de estudiar en el extranjero puede parecerle abrumadora incluso a la persona más segura de sí misma. Hay que ser valiente para dejar atrás a la familia, a las amistades y todo lo conocido a cambio de un nuevo entorno que resulta completamente ajeno. Pero también puede hacerte más independiente, mejorar tu autoconfianza y aportarte seguridad en tu propia valía. Todas esas capacidades te ayudarán a salir adelante mientras estés en el extranjero y, lo que es más importante para tu futuro, se trata de capacidades que los empleadores valoran.

Estudiar en el extranjero... te abre los ojos y la mente

Muchos de nosotros hemos crecido en entornos bastante estrictos, con un conjunto preestablecido de valores y creencias. Por lo tanto, nuestras experiencias y las situaciones a las que nos hemos visto expuestos pueden ser bastante limitadas. Estudiar en el extranjero es una excelente forma de superar estas limitaciones y abrirte los ojos y la mente a todo lo que el mundo te puede ofrecer. Empaparte de otra cultura te aportará las ventajas y los desafíos que conlleva conocer a gente muy diversa, con ideas, opiniones y puntos de vista muy diferentes. Si logras aprender a comunicarte de forma eficaz con todos los que te rodean y llegar a considerar vuestras diferencias como algo positivo, podrás aplicar estas capacidades en tu futuro trabajo.

Ahí lo tienes, pues: cuatro motivos por los que estudiar en el extranjero te puede ayudar en tu trayectoria profesional. Si te interesa la oportunidad de trabajar en el extranjero, consulta nuestro reciente artículo Trabajar en el extranjero: ¿qué me puede aportar?

Artículo elaborado en colaboración con EURES, el portal europeo de la movilidad profesional.

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