Por qué dedicar tiempo a su página de Facebook empresarial es una buena inversión

EURES

Pål Kaalaas trabaja en el área de marketing digital para Global Savings Group y Savly. En este artículo se explica por qué dedicarle tiempo a la página de Facebook tiene sentido para toda empresa que cuente con presencia digital:

Vamos a dejar algo claro, antes de nada: este artículo no se centra en las «plantillas de publicaciones» que permiten crear contenido con aspecto de anuncio. No estamos hablando de informar a las personas sobre descuentos ni de pedirles que se suscriban a boletines de noticias. Este artículo trata sobre la creación de contenido que capte a sus seguidores, cree un sentido de pertenencia y atraiga a nuevos seguidores a su universo de Facebook.

¡Captación! Esta palabra debería estar colocada en forma de enormes luces de neón en la pared de cualquier empresa que necesite generar un grupo de clientes fieles en una época en la que la fidelidad no resulta fácil alcanzar. Estamos empezando a observar el comienzo de una era en la que la mayoría de personas pueden pedir productos o servicios procedentes de cualquier lugar del mundo con tan solo un clic de ratón. De usted depende entender esto como un problema o como una interesante oportunidad para crear nuevas relaciones con clientes.

Independientemente del sector al que pertenezca, como empresa pequeña o mediana deberá competir con «los peces gordos» y con sus enormes presupuestos de marketing; esos que pagan por hacer llegar sus mensajes a cada casa a través de anuncios televisivos o carteles publicitarios. No hay nada malo en esto, pero no todo el mundo puede permitirse este tipo de estrategia. Aquí es donde Facebook y otros canales de medios sociales desempeñan un papel importante, ya que tienen la capacidad de convertirse en una forma ideal de atraer la atención del grupo diana.

Hoy en día, la mayoría de empresas están en Facebook, pero algo totalmente distinto es cuántas de ellas dedican esfuerzos continuos a mantener la página en el medio social. La mayoría no piensan en formas creativas de expresar sus mensajes y suelen acabar insistiendo con los boletines de noticias y descuentos que ya hemos mencionado. No hay nada malo en anunciar ofertas de vez en cuando, pero si la mayoría de sus publicaciones se centran en esto, le resultará difícil crear fidelidad o un sentido de pertenencia.

Se trata de generar compromiso. Existen numerosas formas de conseguir esto pero, ¿qué le parece si empieza por preguntarle a su grupo de clientes su opinión acerca del nombre de un producto nuevo, elementos que faltan en su tienda o alternativas para un nuevo logotipo? Puede organizar competiciones, mostrar fotos «entre bastidores», compartir artículos interesantes, crear un cuestionario u organizar un seminario web. Las posibilidades son infinitas. Se trata de entretener a las personas mientras les hacemos sentir que pertenecen a algo mayor. Es decir, que forman parte de una comunidad. Que usted está en el mismo bando que ellos porque es personal y cercano.

Esto último es importante: no puede ser personal sin conocer su marca, su producto ni su voz. Y lo más importante de todo: sus consumidores o clientes. Conectarán con usted siempre que hable de temas que tengan sentido. Por ejemplo, si vende herramientas, sus posibles clientes probablemente estén interesados en la forma de usar sus dispositivos.

¿Y por qué no darle un giro de 180 grados? Pregúntele a los clientes sus propios consejos y trucos. Facebook puede convertirse en la versión moderna de un mostrador de tienda. En la época en la que vivimos, muchas personas ya no hacen cola delante de un mostrador y ello provoca que tanto los clientes como los propietarios de la tienda pierdan la oportunidad de entablar relaciones a través de conversaciones. No estamos hablando de frases como «¿cuánto cuesta?» o «¿lo quiere para regalo?», sino de «¿cuál es su comida favorita?», «¿qué le gustaría construir en el jardín?», «¿a dónde se va de vacaciones?» o «le voy a dar un consejo estupendo».

Se trata de construir una conciencia de marca positiva. Se trata de resultar atractivo para sus clientes. Sus productos y servicios son fundamentales pero, si uno no ofrece la oportunidad de conocer a una persona real que sonría y atraiga, ¿por qué iban a acordarse de su marca y volver a elegirla en un futuro?

Un último aspecto: presupuestos. Facebook es un negocio. Para generar un grupo de clientes potenciales, es posible que tenga que gastar entre 5 y 10 € en publicaciones básicas orientadas a las personas a las que quiere llegar. Si el contenido es lo suficientemente bueno, esta es la única inversión que deberá realizar. Entiéndalo como una forma de darle un impulso a su publicación para que un mayor número de personas puedan descubrirla, hacer clic en «Me gusta» y añadir comentarios.

¡Colóquese tras el mostrador y póngase a trabajar!

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