Diez cosas que todo buen mentor debe hacer

Conocerse mutuamente

Para establecer una buena relación laboral con su mentorizado, es importante que primero se conozcan. Ya sea en una sala de reuniones, en una zona de descanso o en la cocina de la oficina, tómese el tiempo necesario para saber más sobre él o ella, de dónde es, qué le llevó a solicitar el programa, cuáles son sus intereses y aspiraciones. Háblele también de usted. Esto hará que ambas partes se sientan más cómodas y «se rompa el hielo».

Construya una relación de colaboración

Explique a su mentorizado que usted no es su jefe ni su profesor. Por el contrario, usted le acompaña en esta experiencia y está ahí para ayudarle a sacar el máximo partido de su programa de mentorización.

Cree objetivos personalizados

Todo programa de mentorización debe tener unos objetivos claros. Colabore con su mentorizado para fijar sus objetivos. Pregúntele qué quiere obtener de esta mentoría, qué habilidades quiere aprender y qué experiencia quiere adquirir. Establecer objetivos personalizados mantendrá a su mentorizado motivado y hará que su experiencia merezca más la pena.

Establezca una comunicación diaria

Ser mentor a veces puede parecer una carga porque suele ocupar el primer lugar en la lista de tareas. Con independencia de lo atareado que esté, asegúrese de disponer de un tiempo específico para hablar con su mentorizado al menos una vez al día. No permita nunca que se sienta como un estorbo.

Enseñe a su mentorizado a encontrar su camino

Un buen mentor utiliza una combinación de consejos y preguntas de orientación. A veces, orientar a su mentorizado para que encuentre la respuesta por sí mismo puede ser más valioso que limitarse a darle la solución.

No tema decir «no lo sé»

Puede que no siempre tenga la respuesta correcta a la pregunta que le haga. No tema decir «no lo sé» y pedir asesoramiento a otros colegas. Esto le enseñará a su mentorizado una valiosa lección sobre el trabajo en equipo y la honestidad.

Mantenga una actitud abierta

En ocasiones, tener la perspectiva de un tercero puede aportar nuevas mejoras a los antiguos procesos de trabajo. Su mentorizado puede advertir un error en su trabajo o señalarle una manera de mejorar sus métodos. Asumir la responsabilidad de sus deficiencias generará confianza en su relación con la persona a la que mentoriza.

Sea positivo

Asegúrese de ser siempre constructivo en sus comentarios. Reconozca cuando su mentorizado haga un buen trabajo. Estas pequeñas afirmaciones le ayudarán a reforzar su confianza.

Muestre empatía

No olvide que usted también fue inexperto una vez. Un nuevo entorno de trabajo, tareas desconocidas y nuevos compañeros: todo esto puede contribuir a una experiencia estresante. Asegúrese de que su mentorizado se siente cómodo en el trabajo y aborde cualquier inseguridad que pueda tener.

Predique con el ejemplo

Ni que decir tiene que un buen mentor debe ser también un modelo a seguir. Si espera que su mentorizado llegue puntual al trabajo y se mantenga concentrado durante la jornada laboral, deberá hacer lo propio. Sea el empleado que busca en los demás.

Un programa de prácticas bien elaborado puede ser muy beneficioso, tanto para su empresa como para las personas que van a realizar dicho programa. Consulte nuestros consejos para ser la empresa elegida por quienes van a hacer las prácticas y dejar atrás a la competencia.

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